
EL “AMBIENTE”
Desde que no dejan fumar en los bares, los excesos de la noche nos fuerzan a cerrar las ventanas. Vivimos en el "Gayxample". Con que… tenemos el ambiente cargadito. Funda de sofá “cama” llena de chinazos y fluidos, ceniceros rebosantes de colillas (vasos, platos y envases de yogur, también). Todo el que entra deja huella, las paredes son testigo. Refugio de almas incomprendidas ahora convertidas en musas. Dobles vidas, intercambio de roles, desnudos gratuitos, pulsiones satisfechas sin criterio alguno… Cualquier “ayudita” siempre ha sido bien recibida. Es de bien nacida ser agradecida. Y como lo bueno se hace esperar, el alquiler siempre se paga con retraso.
LA INMACULADA CONCEPCIÓN

El punto de partida fue el punto de no retorno. La base ya la teníamos, amor. El flirteo no fue necesario, pero si los preliminares. 69 nombres hasta dar con el correcto: Barbitúrica Burlesque. Abiertos a experimentar y sin miedo a probar cosas nuevas, dimos rienda suelta a nuestros deseos más íntimos. Compatibles en roles y con fetiches afines, pronto llegó la consumación. Y a partir de ahí no hemos dejado de “crear”.
EL PARTO
La Matrona, experta en partos naturales y con técnicas no aptas para mentes sensibles… no lo tuvo fácil. Contracciones irregulares y a horas intempestivas, dilatada en exceso y sin epidural. Pero por “sus ovarios” la sacó. Y eso que La Barbi venía de culo.


LA BARBI
Barbi es un cuadro, pero viene de provincia. Barbi es poder estar viviendo una tragedia, mientras se crea una comedia. Barbi es terapia. Barbi es un quiero y no puedo. Barbi es Pasión. Barbi es escuela, probar sin miedo. Barbi es cariño, la prueba de que uno más uno pueden ser 2, pero 2+2 pueden ser 22. Barbi es amistad. Barbi es visibilidad. Barbi es respeto. Barbi es fiesta. Barbi es trabajo. Barbi es trabajar en días de fiesta. Barbi es convertir el trabajo en una fiesta.
Ah… Barbi es rosa, Barbi es terciopelo, plumas, lentejuelas, tacones, pelucas, silkepil, laca Nelly, leopardo…
Tranquilas… no os habéis equivocado de página.